Juegos de Guerra: El sufrimiento del listo
La imaginación del director se deja fluir constantamente, o debería ser un flujo de neuronas obstruidas en pensamiento impíos. El director manda al hacker que se curre un script en Perl para mandar un correo a una dirección e-mail al azar con un mensaje amoroso. El director aplaude como los monos, y menciona para sus adentros: que venga un negro dos días después a abrir su "puerta trasera" no tiene precio, mientras ordena al negro que salga con cara de sorprendido. El negro ve al hombre en su recogijo (estaba diciendo: ¡Chupiguay, tengo el SO más seguro del mundo! Me he asegurado de que no existan puertas traseras), le baja los pantalones y le demuestra que hay que ser más seguros. Resulta que el negro sabe también Perl. Hace el mismo script y por casualidad da con el mismo hombre. De nuevo, puerta trasera rota. El hacker, consciente de que el negro no tiene interfaz gráfica, le envía una foto del creador de la consola de comandos BASH. Como ya imaginaréis, se pasará la vida buscando al creador para apuntarle con su pollaza.
Parece que el hacker está bien tranquilito, pero aún tiene que aguardar a un cabrón que se recogija con su título de Sir recién obtenido. Sí, es una figura oscura, misterosa y recelosa. Pesará como una losa en su conciencia, y más cuando el Sir le mete un pedazo de carbón ardiendo en los calzoncillos. Hacker salta y Sir ordena. Impera lo segundo, el hacker se dirige a una tienda de ropa para comprar un parche que le haga evitar nuevas puertas traseras rotas. Ve a muchas mujeres con poca ropa que le miran con lujuria, mientras el carbón sigue inutilizando el cipote... Se compra la solución, a la vez que sale el carbón ardiendo. Cae en su mano, que se quema. La mano diabólica tira el carbón tan lejos, provocando un gran incendio en la tienda... Muchas dependientas huyen sin ton ni son, por lo que el hacker tiene que ser comprometido y dejar atrás prejuicios para poder sacarlas.
Saca a las mujeres. Como en eso de las estadísticas nunca he sido ducho, he de decir que 12 de las 11 mujeres se confesaron ante el hacker. Éste estaba acostumbrado a elegir distribuciones de Linux y BSD, pero con las mujeres le costó mucho más. Al final se decantó por la dependienta pija tetuda aparentona, porque quería ir a por alguien con mucho cuerpo y que impusiera. Aunque eso último es un decir, porque la sesión de sexo fue muy mala. ¿Resultado? Un hacker que no acertaba con la base y no lograba mantener la erección, y una pija más empeñada en follar con estilo.
Esto acaba con una escena del Sir para poder dar sentido al título, una escena del hacker y él jugando a un Battlefield 2 en online. Cuando el hacker consigue vencer por primera vez al Sir, éste le revela quién es: ¡el Director!. El hacker se alegra, así que follan salvajamente sin parar hasta que mueren de inanición.
¡Al pozo con esta historia!, dirán algunos. Pero todos debemos contribuir a dar un giro de 18º, 19º, 180º o lo que sea al porno conocido, ¿no? Para que no se note que sólo sea chicha, chicha. Aunque me temo que tendrá poca demanda, porque creo que el consumidor promedio de porno sólo quiere películas con más chicha, chicha. Quizás me la cubran algunos usuarios avezados de porno, no sé. De todas formas, es demasiado pronto para hacer aseveraciones. Sólo me queda disfrutar de lo que he escrito, a ver si me llega algún que otro comentario. Con eso ya tengo el cupo cubierto xD
2 comentarios:
comentario : asco (>-<)
Jo, cuanto humor geek condensado.
Me quito el sombrero ante ti.
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